jueves, 28 de marzo de 2013

Ometepe – Isla en el Lago Cocibolca-


El sábado 23 de marzo inicie una vista corta a la isla de Ometepe, en el Lago de Nicaragua. Es realmente un extraordinario lugar, muy nuevo y diverso para mí. Es un sitio hermoso, por su naturaleza y paisaje, la amabilidad de sus habitantes, por la cercanía a Costa Rica y por ser bastante económico.

Iniciar
é mi narración en la frontera de los dos países, luego de viajar unas 5 horas desde Zapote, San José. Creo que abrieron a las 6:00, cuando ya había unas 1500 personas tratando de cruzar en el mismo sentido que yo. Se hace la fila zigzagueante a pleno sol (!dos horas!), se llenan las dos boletas de migración y se pasa a una de las 7 ventanillas (en el lado costarricense), el trámite propiamente dicho, con lectora de barras para el pasaporte, tarda unos dos minutos y es gratuito. Se regresa al vehículo, se cruza la frontera y se presenta el pasaporte (con la otra boleta) en la oficina de migración de Nicaragua, allí se tarda un poco más porque el control y verificación no está totalmente automatizado. Cuesta $13, los sellos de salida y entrada, más la tarjeta de turismo (consérvela), la foto y su carita (sin anteojos) son revisados por oficiales que suben al bus. El control de aduanas prácticamente no se hace a la salida y es somero a la entrada, situación que se vuelve a dar al regreso. Cambié ȼ10 000 y me dieron 450 córdobas. Un refresco embotellado 20 córdobas, servicio sanitario ȼ100.

Puesta de Sol, San Ramón, 23/03/2013.

De la frontera a la ciudad de Rivas se tarda máximo una hora y de allí al muelle en San Jorge unos 20 minutos o más dependiendo si va en carro, volanta o caminando.
A las 13:30 abord
é la lancha (Karen María). Digamos que su techo (plataforma) queda convenientemente a nivel del muelle, por lo que puede abordar fácilmente con solo dar un paso. Al principio anotaron los nombres de los pasajeros, pero no hubo control al final. Fue cargada con una gran variedad de mercadería empacada, deslizándola por un plano inclinado aprovechando el trabajo de la fuerza de gravedad (lo difícil será descargarla cuesta arriba). En la plataforma-techo se colocan las maletas de los viajeros, motocicletas, bicicletas y muchos pasajeros, sostenidos por la fuerza de rozamiento entre sus traseros y el piso, porque la lancha no tiene barandas. Quizás como usted se imagina uno de esos trenes en la India. Desde luego hay algunos asientos para unos 20 pasajeros. Vi la lancha cuando se acercaba al puerto, bamboleándose hacia atrás y adelante y a los lados y quise tener la experiencia de montarme en esa “tagada”, así que me quede arriba. Viajaban unas 60 personas, -mita y mita- nacionales y turistas extranjeros.
Pescador lanzando su red.
Un curioso personaje tenía bajo su brazo un colorido gallito fino como de pelea, que no supe si iba a visitar a su gallinita novia, a broncearse en las playas o con destino a la olla, de vez en cuando nos mirábamos y me parecía que el ave me decía “-vengo en son de paz-“. Poco antes de partir los vendedores nos dieron el concierto de colores, olores, sabores y sonidos: “rosquilla, rosquete, mixta, churritos, agua helada, enchiladas, maní, fresco, chicharrones, papas, tajada, pasteles, repollo, cajeta.”

La isla (“ome”: dos,” tepetl”: montaña), puede simularla como dos tortillas  con queso palmeadas  una casi del doble de diámetro que la otra. Con el resto de la masa únalas hacia el sureste con un pequeño istmo y luego le centra en cada una los dos volcanes; Concepción y Maderas. Quizás si las hornea con cuidado resulta un bizcocho para acompañarlo con buen café nica.

Lavando ropa en el Cocibolca.

La lancha nos llevó en una hora al puerto de Moyogalpa, el pasaje cuesta 35 córdobas, se puede comprar un boleto previamente, pero la mayoría pagamos en efectivo poco antes de atracar. En Moyogalpa, o en Altagracia puede comprar agua (3 litros por 50 córdobas), galletas, papitas y otros víveres, pero si está acostumbrado a llevar a sus caminatas frutas jugosas que le aguanten el trajín (manzana, melocotón, ciruela), mejor consígalas en supermercados de Rivas o Granada.
Saliendo de Moyogalpa hay una pista de aterrizaje, lógicamente con su carril de acercamiento y despegue perpendicular a la costa. La carretera hacia el sur la atraviesa casi al final. El paso est
á limitado con alambradas de púas a ambos lados, quizás ya algunos pilotos han perfeccionado "el método del brinquito".

Orto del Sol, Finca Venecia, 25/03/2013.
En cuanto a transporte puede alquilar bicicletas, tomar taxi o buses ( en ellos se puede cargas las bicicletas si ya no aguanta). El camino alrededor de la tortilla mayor está completamente adoquinado, lo mismo que la parte Este del istmo, hasta Playa Santo Domingo y el poblado de Santa Cruz. Puede dar toda la vuelta a la menor, por camino de tierra (en realidad sobre infinito numero de piedras). También puede traer su propio vehículo utilizando el ferry “Rey de Cocibolca”, que regresa de San José del Sur a las 7:30 (55 córdobas por pasajero).

Hospedaje consigue para todos los gustos, sencillo, limpio, económico, a la orilla del lago, en casi todos los poblados. Visité la Estación Biológica San Ramón muy bien situada para observar la puesta de sol con horizonte marino y  también la cercana catarata San Ramón, una caminata de dos horas (la mitad la puede hacer en vehículo).
Ocaso del Sol, Finca Venecia, 25/03/2013.
También visité Hacienda Mérida , Finca Venecia y Charco Verde, donde puede caminar hasta playa Bancón, que tiene la isla “El Quiste” curiosamente ubicada como si fuera la base del volcán Maderas. Si va preparado puede permanecer allí todo el día, disfrutando del agua dulce del lago, las olas mansitas y la playa de arena negra muy suave (20 córdobas). Me faltó todo el lado norte de la isla, será para la próxima, porque creo que si volveré. 
Para comunicarse no hay problema, en una venta de sandias hecha de palitos su dueño gentilmente me ofreció su teléfono celular, mandamos a comprar 40 córdobas de carga y alcanzó para cuatro llamadas a Costa Rica y sobró un poco para el amigo nicaragüense. En la noche me comuniqué usando mi teléfono sin ningún problema. En la mayoría de los hoteles hay Wi-Fi. 

Para almuerzo y cena opté por una carga de rico “plátano chips” ($1,50), con poquita sal, crujiente, sin grasa y una infaltable “toña” (ȼ500). También un delicioso pescado entero o un enorme filete de tilapia.

Luna llena -5 horas. Liberia, Guanacaste
26/03/2013
.
El regreso a Costa Rica (martes 26), fue más simple, 30 minutos en migración, tarjetas  de salida  y entrada, sellos en Nicaragua ($3), 5 minutos en Costa Rica y una revisión al ojo en la aduana.


A las 18:30 llegamos a Liberia, un refresco y una deliciosa empanada  de masa con relleno de carne mechada en el Centro Comercial donde estaban las gasolineras. Una misteriosa “luna liberiana” casi llena, escondiéndose entre nubes y ramas de los árboles me mir
ó por un rato. A las 23:00 estaba de regreso en Zapote, para el final de un viaje de 4 días menos 1 hora. Le recomiendo hacer algo similar.
E
n unos días le cuento mi experiencia con los volcanes.