La
lectura es la actividad más completa que usted puede hacer en estos momentos.
Ni de lejos se compara con ver televisión o mirar mensajes “reenviados” a su
celular.
Yo nunca reenvío, yo escribo. Así, además de los otros beneficios de la lectura, usted puede identificar a un responsable.
La
lectura la permite “imaginar” con sus “propios” recursos mentales
lo que el autor le está planteando, volar con el autor y con el personaje a las
situaciones y lugares que en un momento estuvieron en la mente y en el lápiz
del escritor.
Pero son solo sugerencias, usted es quien decide ¿cómo
interpretar? y más importante, ¿qué hacer”?, puede decidir como continúar y hasta escribir una “saga”.
Quien
quita un quite, a lo mejor el estímulo para escribir su primer libro, lo encontrará
en “La Fiesta”.
Venga
a la Antigua Aduana, sólo el edificio y el ambiente lo va a llenar de
satisfacción.
Ni que se diga de las publicaciones que encontrará y la oportunidad única de
conversar con autores, escritores, editores, vendedores de libros, amigos y conocidos
que quizás encuentre.
Mi
primera experiencia de este tipo fue el 18 y 19 de marzo de 2017, cuando
participé en el “Corredor Literario¨ para el “Festival de Verano
TransiArte, celebrado al aire libre en el Parque España, en San José.
Sólo teníamos tres libros de cuentos, mi amiga María Lissete Alvarado, la autora
principal, y yo: “La Tinaja de Guaitil¨, ¨Chindo y Maura” y “El
escorpión de Jade”, cada uno con 5 cuentos cortos. Fue una experiencia muy enriquecedora;
exponer, conversar con el posible comprador, vender algo.
Luego
vinieron dos o tres “Ferias del Libro”, en los años
siguientes, donde
estuve en el stand de mi editor en la “Casa del Cuño”, en la Antigua
Aduana.
Esa vez hasta actuamos un pasaje de uno de los cuentos y leímos poesía.
Teníamos tres
libros más: “Tus fotos sin una cámara”, “Los demonios de Occator”
y “¿Dónde está el conejo?”.
Cuando
la feria se celebró fuera de la Antigua Aduana en los años siguientes, para mí
ya fue otra cosa, algo distante y quizás dominada por las grandes editoriales,
¿demasiado comercial? No participé.
Celebro
el regreso al sitio con que empecé.
Venga en este fin de mes de octubre, conozca y participe de todas las actividades conexas.
Estoy
seguro de que en “La Fiesta Nacional de la Lectura” encontrará al
autor y al libro que le falta.
Hay
hasta un rinconcito donde usted puede traer su libro usado que ya leyó muchas
veces y lo cambia por otro. Eso sí no se abuse.
Venga, hasta el café y la merienda son buenos.
😀¡ Nos vemos en o cerca del puesto número 28!😊
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